Tras esta larga temporada en la que no he podido escribir en mi blog quiero agradeceros a todos el haber continuado visitándolo y aportando vuestros comentarios, así como las muestras de interés recibidas en estos días.
Hoy regreso con el comentario de una película. Aunque es del año 2007 yo no la he visto hasta el pasado fin de semana. Se trata de Ben X. La película trata de la vida de un adolescente con Síndrome de Asperger que ha pasado toda su infancia acosado por sus compañeros e incomprendido por los adultos. Ese acoso es cada vez mayor provocando que Ben se hunda en la desesperación. Encuentra su apoyo en un videojuego en el cual adopta un personaje fuerte capaz de enfrentarse a las adversidades y superarlas con éxito acompañado siempre por una compañera de aventuras virtuales. Cuando el acoso que sufre llega a sus cotas más altas, Ben se apoya en lo que ha aprendido en el videojuego para enfrentarse a sus problemas de la vida real.
La película es muy dramática, yo sufrí bastante al verla ya que son situaciones que suceden en la vida real y a las cuales se tienen que enfrentar las personas con TEA con el agravante de que en la mayoría de las ocasiones no cuentan con los medios y estrategias necesarios para enfrentarse a ellas. Las dificultades en el área social (que se reflejan muy bien en la película) van a agravar estas situaciones.
En el instituto Ben no recibe los apoyos adecuados. Sus profesores saben que es diferente pero no se implican. Prefieren evitar ver los problemas para no tener que enfrentarse a ellos. No respetan sus peculiaridades. Se limitan a admitirlo en las clases como a cualquier otro alumno pero sin plantearse que sus necesidades son diferentes y por ello requiere de intervenciones más específicas. Los compañeros tampoco han recibido una formación adecuada acerca de lo que le ocurre a Ben y de cómo deben relacionarse con él. No hay respeto por la persona diferente.
Yo he extraído una conclusión de esta película: Todos los que conformamos el entorno de una persona con TEA somos responsables en los casos de acoso escolar. Los que lo hacen, los que lo ven y callan, los que prefieren mirar hacia otro lado, los que deciden no implicarse, los que no dan la información al resto de chavales, los que no adaptan su metodología, los que no ponen los recursos necesarios a disposición de todos, los que no están atentos a las señales de alerta…
¿Podremos cambiar esta situación? Espero que sí, y que películas como Ben X sirvan para abrirnos un poco los ojos ante este tipo de situaciones.
Saludos y hasta dentro de unos días…
Hola de nuevo, Lucía – Lupe. ¡Ya se te echaba de menos! Espero que estés bien.
Interesante y necesaria entrada (palabras clave nada menos que «acoso» y «asperger»…). Si te apetece, mira este enlace en el blog de ASPERCAN:
http://aspercan-asociacion-asperger-canarias.blogspot.com/2008/07/pelcula-ben-x-sobre-asperger-y-acoso.html
Saludos,
Paula
Es una pelicula muy buena, gracias por compartir, besos
Gracias por el nombre de la peli, Lupe, tengo tantas cosas pendientes…pero me tengo que poner a ver algunas películas, en especial de éstas, el tema es que me afectan doblemente…como profe y como madre.
Cuando te enfrentas a este tema y denuncias (desde fuera) a veces no te quieren oir, a pesar de toda la política anti-bullying que parece haber. Es una pena..
Ahora mismo estoy en un IES público; he observado al menos dos casos graves de acoso escolar. En ambos los chicos dan el perfil Asperger, especialmente uno de ellos. Ignoro si está diagnosticado o no, pero no tiene ningún tipo de atención específica (puede que sea, como siempre, debido a que es un estudiante especialmente brillante y que esté dentro del Bachillerato, de naturaleza «selectiva» y sin atención a la diversidad en la praxis). El otro caso da el perfil más levemente, y está en 4º ESO. Tampoco tiene adaptaciones, salvo en mi asignatura (en la cual le he cargado con actividades de ampliación, nivel 3, y monografías sobre temas que le interesan o «a través de» esos temas ).
Como, en mis tiempos, desde preescolar hasta 1º de carrera (aunque tuve la suerte de cursar el segundo ciclo de ESO y Bachiller en un centro privado que prevenía, eficazmente, el acoso escolar con férrea disciplina), yo también sufrí lo mío, me ví identificada absolutamente con el chico de 2ºBachillerato y conseguí ganarme su confianza y hablar con él en privado sobre lo que le estaba pasando, a pesar de la pasividad de su tutor. Las agresiones se extendían hacia el exterior del centro educativo, como suponía. Tengo una «teoría» al respecto: el acoso escolar no es un conflicto de grupo, sino una actitud generalizada que busca precisamente la uniformidad del grupo (no sólo del grupo-clase, sino de la nación, raza, familia, &c.), eliminando todo aquel elemento divergente en cualquiera de los posibles sentidos (por arriba, por abajo). La sociología (Munné, por ejemplo) me da la razón. Cuando trato de explicárselo a alguien de manera informal suelo decir, en plan de broma (o no tanto), que «son como pequeños nazis». EL caso es que no se trata sólo de conflictos, no se trata sólo de crueldad… Hay más. La película BEN X lo refleja ben: el grupo, unido y uniforme, bajando los pantalones de Ben.
¿Podemos hacer algo? No. Lo que hice fue acudir a la orientadora, la cual dijo que él tenía parte de culpa «porque no se integra, habla mucho en clase, resulta desagradable a sus compañeros» (la última frase es reveladora: desagradable, no se integra…). Recalcó su ineptitud social. Así no se puede hacer nada 😦
Pero nada con nadie: EA o no EA. Ben X refleja muy bien, también, la pasividad del profesorado con respecto al acoso (la pasividad de la orientadora es, sencillamente, escandalosa y frustrante) o algunas meteduras de pata con buena fe (halagar delante de los acosadores ell rendimiento académico del acosado, por ejemplo). Yo estoy planteándome alguna innovación en este ámbito como motivo para una tesina, pero estoy en blanco. Sólo se me ocurre una cosa: disciplina. Y eso sólo lo tapará; sensibilizar a los adolescentes es imposible. Los SA y AAF no somos lo más empático del mundo, pero algunos adolescentes dejan mucho que desear 😉